RIMA XIII

 

Tu pupila es azul, y cuando ríes,

su claridad suave me recuerda

el trémulo fulgor de la mañana

que en el mar se refleja.

 

Tu pupila es azul, y cuando lloras,

las transparentes lágrimas en ella

se me figuran gotas de rocío

sobre una violeta.

 

Tu pupila es azul, y si en su fondo

como un punto de luz radia una idea

me parece, en el cielo de la tarde,

¡una perdida estrella!